Quedan siete días para ir a votar. Siete días para decidir cómo queremos ser, cómo queremos vivir, qué país queremos construir.

Y esa decisión no está escrita por mucho que alguno se empiece a colgar la medalla del ganador. Se escribirá con los votos de todos y cada uno de los ciudadanos y ciudadanas de Euskadi.

Por eso hoy, en el acto central de la campaña socialista, me he dirigido a la ciudadanía vasca, para decirle que es mucho lo que está en juego; que vayan a votar; que no se queden en casa y permitan que otros decidan por ellos (y con seguridad en contra de ellos).

Ya sé que en campaña parece que todos decimos lo mismo. Que todos somos buenos y que queremos lo mejor para todo el mundo. Pero hay mucho lobo con piel de cordero. Hay demasiados que ocultan sus verdaderas intenciones en palabras huecas.

Porque, a la hora de la verdad, no todos los caminos llevan al mismo sitio. No todos somos iguales. No todos defendemos lo mismo.

El aspirante del PNV se ha pasado la campaña diciendo que va a haber que hacer sacrificios, que los Presupuestos del año que vienen tendrán muchos menos recursos, que la situación es de emergencia…

Nos está anunciando que va a recortar. Y que va a recortar mucho de los gastos del Gobierno. Y los gastos del Gobierno son educación, sanidad, seguridad, investigación, innovación, ayudas a las empresas…

El cuento ya lo conocemos. Lo hizo antes de las elecciones generales Rajoy. No nos contó nada y luego sacó, no la tijera, sino la guadaña.

Ya está bien. Si dice que hay que recortar 1.000 millones de los Presupuestos, que nos diga de una vez de dónde los va a recortar, a quién va a cargar los sacrificios. Que deje de esconderse.

Que nos diga de una vez a quién le va a recortar.

¿Quiénes serán las personas a las que no se les va a hacer una operación porque es muy cara?

¿Quiénes serán las personas que tendrán que esperar y esperar en las listas de espera, porque Urkullu ha dicho que no es prioritario?

¿Quienes serán las personas que no van a tener ninguna ayuda cuando se han quedado sin nada, porque Urkullu ha decidido no luchar contra el fraude y dice que no tiene dinero?

¿Quienes serán los jóvenes que no podrán seguir en la Universidad porque Urkullu ha dicho que no hay dinero para esas cosas y que hay que subir las tasas académicas?

¿Quienes van a ser las personas que cuando pidan ayuda se encontrarán con las puertas cerradas en el Gobierno Vasco?

Van ser las personas más humildes, las que más necesitan de la solidaridad pública, las que se queden fuera. Porque cuando recortan los Presupuestos recortan la vida a los de siempre.

Por eso digo que es hora de unir fuerzas. Es hora de despertar y no quedarse en casa. Porque si nos quedamos en casa les van a entregar el país para que hagan lo que quieran.

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