El PSOE está haciendo su camino. Estamos haciendo lo que hay que hacer para salir reforzados y retomar de nuevo la confianza de la ciudadanía progresista de España: redefinir nuestro proyecto para dar las respuestas que necesita, no sólo el nuevo tiempo que estamos viviendo, sino, sobre todo, la gente que peor lo está pasando en esta crisis.

En este sentido, la Conferencia Política del mes que viene va a ser un hito importante en la renovación de la propuesta política del Partido.

Miles de personas han participado en este proceso de reflexión. Y estoy convencido de que vamos a salir reforzados de esa Conferencia. Yo siempre he defendido la renovación del proyecto socialista. Y siempre he marcado las mismas prioridades:

  • Primero las ideas. Porque si no renovamos las ideas de nada sirve el resto.
  • Luego la organización. La adecuación de las estructuras del Partido para hacer frente al nuevo tiempo que demanda más apertura, más transparencia y más participación para  poder defender y aplicar la nueva propuesta política del PSOE, con mucha más gente.
  • Y por último las personas. Los responsables que legítimamente liderarán ese programa renovado.

Y lo estamos haciendo razonablemente bien. Tenemos problemas; pues claro que tenemos problemas, porque un esfuerzo de este calibre requiere sacrificios y renunciar a viejos esquemas. Pero eso es lo normal.

Lo que no sería normal sería un silencio sideral en el partido, esperando ver a quién señala un dedo gigantesco salido de los cielos. Como hace la derecha.

Lo normal es que tengamos opiniones diversas. Y lo bueno es que en el PSOE sabemos discutir, debatir las divergencias y también llegar a acuerdos que nos unen. Más de 125 años llevamos así. En eso no vamos a cambiar. Primero discutimos y luego todos y todas nos ponemos a trabajar por el acuerdo.

Pero la derecha se está poniendo nerviosa. Nerviosa porque sabe que está en caída libre, sabe que el PSOE va a salir reforzado de esta Conferencia y sabe que el siguiente Presidente de España va a ser un socialista o una socialista.

Y por eso intentará crear, desde el infundio y la falsedad, división entre los socialistas. La derecha no ataca a una persona, que esta vez he sido yo, pero mañana será otra. Lo que quiere es romper la unidad del Partido.

No nos tenemos que dejar engañar y entrar en su juego. No va a ser la primera vez ni la última. Intentarán poner unas personas contra otras, unas federaciones contra otras, inventando rencillas y divisiones inexistentes.

Por eso quiero aprovechar este post, para hacer un llamamiento a la unidad del Partido. A no desviar nuestras energías en disputas inventadas por la derecha.

Nuestras decisiones no nos las tienen que apuntar desde fuera, desde medios controlados por intereses ajenos a los nuestros. Nuestras decisiones las tomaremos todas y todos los socialistas juntos, de acuerdo a nuestras organizaciones y cuando toque tomarlas.

La derecha se está poniendo nerviosa porque estamos avanzando, porque vamos renovar el proyecto socialista para España y porque con él recuperaremos el espacio de progreso en este país.