En este Congreso está en juego mucho más que la decisión sobre quién debe dirigir el Partido Socialista durante los próximos años. Todos los Socialistas debemos afrontar con realismo y determinación los retos pendientes para lograr que el PSOE vuelva a ser el partido que más se parece a nuestra sociedad, con el objetivo de recuperar la confianza de la mayoría de los españoles.
El PSOE debe llevar a cabo una revisión a fondo de su modelo orgánico en el marco del 39 Congreso, con el objetivo de adaptar su organización al nuevo tiempo que se abre tanto para la militancia socialista como para el conjunto de la sociedad española.
La actualización y mejora de la organización socialista debe plantearse desde los principios de la apertura, la modernización, la eficacia y la calidad democrática.
El PSOE ha hecho grandes cosas por este país, ha levantado nuestro Estado de Bienestar, ha modernizado nuestra sociedad y nuestra economía, ha articulado política y territorialmente España, ha dado cauce a la participación política de millones de españoles con una organización abierta, esforzada, moderna y capaz.
Pero también es verdad que el PSOE debe resolver problemas pendientes en la organización: el primero y más grave es el de la división interna. Llevamos demasiado tiempo gastando energías y perdiendo credibilidad ante los españoles a causa de las controversias en el seno de nuestro Partido. Si no superamos esta grave limitación para el buen gobierno de nuestra propia casa, nos será muy difícil convencer a la mayoría de la sociedad española de que estamos preparados para gobernar el país.
Hemos de reflexionar con rigor y acierto sobre las medidas a adoptar para mejorar nuestra relación con los nuevos movimientos cívicos, tanto en el ámbito urbano como en el medio rural. Tenemos que formular nuevas estrategias para aumentar la afiliación, especialmente entre los más jóvenes.
Y el PSOE debe actualizar su estructura, sus normas, sus maneras de funcionar, para abrirse más a las nuevas dinámicas sociales, para ser más permeable a las buenas ideas que se mueven fuera, para coincidir más con las nuevas maneras de participar en el espacio público compartido… Un partido más abierto, más poroso, más ágil, más democrático, más tecnológico…
La cultura política del PSOE es una cultura profundamente democrática. Los demás tienen poco que enseñarnos a este respecto. Nuestra militancia quiere participar de manera abierta y clara, pero sin asamblearismos estériles. Y nuestros liderazgos han de ser colectivos y plurales, sin salvadores ni cesarismos. Ningún militante sin voz, y ningún cargo sin control.
Queremos un Partido con un liderazgo compartido, en un equipo en el que todos y todas cuenten, desde el cargo más importante hasta el militante recién llegado. Una Secretaría General que cuente con otros responsables del Partido, que coordine propuestas y unifique criterios.
Queremos un Partido en el que entendamos que pensamientos diferentes enriquecen nuestro proyecto; que el que critica no es un disidente. Pero queremos un Partido, también, en el que recuperemos el valor de la lealtad, del compañerismo y de la fraternidad. De ahí nace la auténtica unidad: del debate y de la libertad.
Queremos un Partido que participe de los principios del “gobierno abierto”: la transparencia, la participación, la rendición permanente de cuentas, y la máxima exigencia ética.
Este es nuestro modelo, y hemos de trabajar para preservarlo, abrirlo, mejorarlo y modernizarlo, al servicio de nuestros valores y nuestros objetivos de transformación social.
Más unidad, más democracia, más apertura, más transparencia, más participación. Éstas son las claves para mejorar nuestro modelo de Partido.
Y porque todo esto no se hizo antes de defenestrar al SG, y porque os abstuvisteis para que nos gobierne este partido. Sr. López, traicionó a quien confío en usted, como lo ha hecho AH y otros cargos de confianza de Pedro Sánchez, ahora van acoser con Susana Díaz todo lo que han destruido. Mi voto, que era suyo, ya no lo será.
A ver, Patxi
Ideas desde la “SOCIEDAD INTELIGENTE”
Si “ESTE” sistema democrático no soluciona los problemas de una sociedad que aspira a ser democrática, ENTONCES ES UN SISTEMA FRACASADO, y habrá que ir a CREAR otro sistema, DEMOCRÁTICO, con un funcionamiento MAS EFICAZ.
EL NUEVO SISTEMA DEMOCRÁTICO no se puede basar en las ideologías que HACEN FRACASAR, EN ESPAÑA, como estamos viendo, “ESTE” sistema democrático ni en sus mecanismos.
LAS IDEOLOGÍAS del Siglo XIX son HOY IDEOLOGÍAS OBSOLETAS que IMPIDEN el DESARROLLO DE LA SOCIEDAD INTELIGENTE. IDEOLOGÍAS que han SIDO CULTURALMENTE IMPOSTADAS EN LA SOCIEDAD ESPAÑOLA, que NO las ha generado, COPIADAS Y PEGADAS aquí desde otras CULTURAS que llevan desarrollando naturalmente una INTELIGENCIA INSTITUCIONAL PROPIA con éxito desde hace mucho tiempo. Hablamos de desarrollo de INTELIGENCIA SOCIAL, no de asumir CREDOS en un simulacro político completamente viciado.
En España, “ESTE” sistema es UNA APARIENCIA de “SISTEMA DEMOCRÁTICO”, producto de la SIMULACIÓN, no de la CREACIÓN.
Seamos “como si…” es la norma de los partidos del PASADO, porque “ya está todo inventado” (F. González, J. Anguita, y todos los demás). Todos PARTIDOS CONSERVADORES.
Pero SI este sistema ya no sirve, y no sirven las soluciones que se proponen PORQUE FORMAN IDEOLÓGICAMENTE parte del mismo, HABRÁ QUE CREAR LAS HIPÓTESIS de otro sistema DEMOCRÁTICO nuevo.
La democracia de la “sociedad inteligente” NO PUEDE basarse en mecanismos de REPRESENTACIÓN CIUDADANA DELEGADA a través de partidos que sustenten esas ideologías impostadas o cualquier otra semejante, COMO LAS DE “NACIÓN” o “PUEBLO”, conceptos sin fundamento alguno en la realidad.
LA REPRESENTACIÓN CIUDADANA DEBE DELEGARSE EN INDIVIDUOS, elegidos para representar a sus votantes, pertenezcan esos individuos particularmente o no a partidos políticos, confesiones religiosas, clubs deportivos o cualquier otro tipo de asociación, CREENCIA O FE, cosa que debe ser publica y notoria (por ejemplo, Melenchon es PÚBLICAMENTE miembro del Gran Oriente de Francia). ESA REPRESENTACIÓN DEBE SER AMPLIADA, en los temas que así se definan, con los mecanismos de toma de decisiones públicas que HOY hace posible la tecnología. LOS ELEGIDOS NO PODRÍAN FORMAR GRUPOS PARLAMENTARIOS PERMANENTES, NI ACTUAR O VOTAR DE ACUERDO CON CONSIGNAS DESDE LOS PARTIDOS, ASOCIACIONES O CLUBS a los que pertenezcan, y, si hiciera falta , DEBERÁN CONSULTAR CADA DECISIÓN CONCRETA Y SU VOTO REPRESENTATIVO CON SUS ELECTORES O, SI SE INSTITUCIONALIZARA, CON SU SISTEMA DE REPRESENTACIÓN AMPLIADA.
UN SOCIEDAD INTELIGENTE asume que gobernar, hoy, SIGNIFICA PROGRAMAR LA OBSOLESCENCIA DE “ESTE SISTEMA” (LLAMADO TAMBIÉN “LA CRISIS”) POR MEDIO DE UN DESARROLLO INSTITUCIONAL PROPIO.
Algunos conceptos básicos para fundamentar el desarrollo de una sociedad democrática eficaz:
RENTA BÁSICA UNIVERSAL, SISTEMA FINANCIERO PÚBLICO, SISTEMA EDUCACIONAL AMPLIADO Y DE POR VIDA, CULTURA INDUSTRIAL, COMERCIAL, ARTÍSTICA Y SOCIAL INTELIGENTE, BASADA EN LA PARTICIPACIÓN Y LA CREACIÓN, NO EN EL “ENTRETENIMIENTO” pagado DE “ESPECTADORES”.
Te llamamos, pues, a ayudarnos a fundamentar el Segundo Estado de Bienestar.
PARTIDO FANTASMA @GosthParty